El pallet es un soporte o plataforma de tablas para apilar la carga de nuestros “vinos Santa Ema” que se despachan dentro de Chile o al exterior. Las posibilidades de reutilizar los pallets son realmente muchísimas. Esto es así porque además de ser fácilmente accesibles, los pallets son muy versátiles, tienen un estilo rústico muy particular y volver a utilizarlos no implica un gasto mayor. ¡Si siempre soñaste con construir tu propia cava con este paso a paso podrás construirla de manera económica y disfrutar de nuestros “vinos Santa Ema”!. dándole un toque original a la ambientación de tu casa y aportando al cuidado del medio ambiente.
Necesitarás:
- Pallet
- Sierra
- Lijas
- Martillo
- Taladro
- Clavos para madera
- Huincha de medir.
Preparación:
- Antes de comenzar, revisa bien el pallet que vas a utilizar para asegurarte que las tablas no estén quebradas en ninguna parte. Luego, con ayuda de la huincha mide tu pallet desde una de las bases hasta aproximadamente la mitad. Haz una pequeña marca sobre la madera.
- Corta con la sierra por donde has realizado la marca. Trata que el corte sea parejo.
- Lijálo para lograr un suave acabado.
- Nuevamente ayúdate de la huincha para medir los espacios libres que han quedado en la base de tu pallet al haberlo cortado.
- De acuerdo a la medida que has tomado, utiliza dos maderas de la parte del pallet que te ha sobrado para realizar la base de tu mueble. Sepáralas con ayuda del martillo.
- Córtalas con la sierra.
- Toma la medida del largo general del pallet y corta otra madera que utilizarás a modo de porta copas inferior (¡súper útil!)
- Lija todas las tablas para quitarle las asperezas.
- Utiliza la última madera separada para realizar los orificios para las copas. Procura hacerlos con el mismo diámetro de ellas, a aproximadamente 10 cm de distancia entre sí y de manera simétrica.
- Marca los agujeros y córtalos con un taladro.
- Luego, corta un rectángulo en la distancia entre el orificio realizado y la base de la madera para que quepa el pie de la copa.
- Acomoda las piezas juntas, alínealas y clava las partes entre sí, procurando dejar espacio suficiente entre la base del estante y el porta copas para que las bases de éstas quepan con comodidad.
- Por último, barniza la madera o píntala del color que más te guste. También, puedes utilizar la técnica de darle una mano de pintura blanca y luego desgastarla con lija para darle un estilo más rústico, antiguo.
- Cuélgalo donde más te acomode.
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